Las manos de un dueño.
Tentado a un equilibrio absurdo,
Estiro mis extremidades y solo logran balancear mi cuerpo,
Caigo, pero me regreso y me incorporo, mi barbilla toca mi pecho y hablo con mi cuerpo,
ahora no es mío
Mis manos son un nudo junto a la textura de un árbol que no me logra sostener.
Me sostengo…
Mis manos son la textura de un árbol que no volveré a ver.
lo escucho una y otra vez.
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